La llamada de la maternidad cada año se va retrasando un poco más. Muchas mujeres deciden aplazar la opción de ser madre para sentirse realizadas en otros aspectos de su vida y aumenta año tras año las mujeres que tienen su primer hijo después de los 40 años. Es por ello, que hacemos este artículo para hablar sobre la fertilidad a los 40.
Buscar embarazo a los 40
A pesar de que se ha popularizado, los 40 no son los nuevos 30, por lo menos cuando hablamos de fertilidad. En esta década existen problemas reproductivos que no se producen siendo más joven. No se puede negar que tus probabilidades de quedar embarazada van disminuyendo. Sin embargo, eso no significa que después de los 40 sea imposible quedarse embarazada y tener un bebé sano.
Muchas mujeres mayores de 40 años quedan embarazadas, algunas utilizando tratamientos de fertilidad y otras no. Y pueden existir beneficios en esperar para tener hijos, tanto para ti como para tu bebé. El embarazo tiene ventajas y desventajas a cualquier edad. Para poder ofrecerte una imagen realista acerca de cómo es tener un hijo después de los 40.
Ventajas
Se cree que el mejor momento para tener hijos es cuando tienes entre 25 y 35 años pero también se reconocen ventajas para las parejas que esperan más. Probablemente la mayor ventaja de esperar para tener hijos es que has tenido tiempo de madurar y ver el mundo. Es muy probable que tengas mayor seguridad económica y te encuentras más afianzada en el plano profesional. Esperar para tener hijos tiene además beneficios económicos. Diversos estudios han descubierto que los ingresos de una mujer se elevan un 9% cada año que pospone tener un hijo.
Otra ventaja, es que si has tenido la misma pareja por varios años, habrán tenido la posibilidad de conocerse bien en distintas circunstancias, lo que les permitirá contar con una sólida base para criar a una familia, pero aún si se trata de una nueva relación, contarás con la madurez que te ha dado la vida.
Algunas investigaciones han probado que las madres de más edad, por lo general han cursado más estudios que las mamás jóvenes, y eso les ayuda a tomar decisiones más adecuadas como madres. Están más preparadas para amamantar y se encuentran en mejores condiciones para tomar decisiones más saludables en torno a la alimentación. Suelen optar, por ejemplo, por comer frutas en lugar de dulces y bebidas azucaradas.
Desventajas
El mayor inconveniente en posponer el embarazo hasta tus 40 años es significativo: cuanto más esperas, más difícil resulta quedar embarazada. Esto se debe a que el número de óvulos se ha reducido de forma importante y, mientras menos jóvenes son los óvulos, tienen una mayor probabilidad de tener problemas cromosómicos, lo cual aumenta el riesgo de abortos espontáneos y defectos de nacimiento.
Las complicaciones del embarazo son otro inconveniente. Al entrar en los 40 tienes muchas más probabilidades de desarrollar problemas como hipertensión arterial y diabetes durante el embarazo, así como problemas de placenta y complicaciones en el nacimiento.
Las mujeres de más de 40 tienen un mayor riesgo de dar a luz a un bebé con bajo peso o un bebé prematuro. Los porcentajes de bebés mortinatos, niños que nacen sin vida, son también más altos y los estudios demuestran que los niños nacidos de madres de más edad presentan un mayor riesgo de diabetes del tipo 1 e hipertensión arterial.
Y no te olvides de tu pareja. Aunque los hombres son físicamente capaces de ser padres después de los 60 e incluso después de los 70, la calidad del esperma se deteriora con la edad y el porcentaje de defectos genéticos es más alto que con el esperma de hombres más jóvenes.
Calidad de los óvulos a los 40
El proceso de envejecimiento reproductivo femenino es gradual, y tanto la calidad como la cantidad de los ovocitos que quedan en los folículos, van descendiendo con el paso de los años.
La reserva ovárica, es decir, la cantidad de ovocitos del que una mujer dispone en su vida fértil para poder quedarse embarazada, se agota mucho antes de lo que se piensa comúnmente. Hasta los 36 años, más o menos, está bien, pero a partir de los 38 años, empieza a disminuir muy rápidamente… y, además, se suma otra cuestión fundamental, que también está muy condicionada por la edad: la calidad ovocitaria. Porque, no basta con tener un número suficiente de óvulos, sino que han de tener una buen calidad, es decir, que estén en las condiciones adecuadas para ser fertilizados.
Como hemos dicho, la cantidad de los ovocitos disminuye con los años. Cuantos más años, menos óvulos. Sin embargo, hay mujeres que tienen más desde que nacen, y otras que tienen menos, o que los pierden más rápidamente. Así que nos podemos encontrar con mujeres de 40 años con una reserva excelente, y mujeres de 30 años con muy poca reserva.
Lo mismo pasa con la calidad ovocitaria. Cuantos más años, peor calidad. Y, tal y como pasa con la reserva, también mujeres jóvenes pueden tener mala calidad ovocitaria. Esto puede ser debido a diferentes causas:
- Endometriosis
- Síndrome de ovarios poliquísticos
- Enfermedades Autoinmunes
- Enfermedades genéticas
- Tabaquismo
- Obesidad
La importancia está en que mientras que los espermatozoides aportan a la reproducción «solo» la carga genética, lo ovocitos, además de su correspondiente contribución genética, tiene que aportar toda la energía metabólica que permita el desarrollo del embrión.
Nuestros ovocitos con los años, como el resto de nuestro cuerpo, van perdiendo esta energía. Si con la edad nos salen unas canas, siempre nos las podemos teñir. Pero con los ovocitos no hay mucho que podamos hacer. A medida que la energía metabólica ovocitaria se va reduciendo, el ADN de estas células también se va deteriorando, con lo que aumentan las alteraciones genéticas. Técnicamente, se habla de un incremento de las tasas de aneuploidias. Este aumento es la razón por la cual una mujer de 40 años tiene más posibilidades de sufrir un aborto o un niño afectado por una anomalía genética (por ejemplo, el síndrome de Down), respecto a una mujer de 30 años.
Cómo mejorar la fertilidad a los 40
Según estudios, alrededor de la mitad de las mujeres de más de 40 tiene problemas de fertilidad. A partir de esa edad, tienes alrededor del 5 por ciento de probabilidades de quedar embarazada en un único ciclo de ovulación. A los 40 la probabilidad de que concibas dentro del año de comenzar a intentar es de alrededor del 40 al 50 por ciento, en comparación con una mujer de alrededor de 35, la cual tiene el 75 por ciento de probabilidades. A la edad de 43, la probabilidad de que una mujer quede embarazada se reduce drásticamente al 1 o 2 por ciento.
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A pesar de todo esto, existen algunas pautas que pueden ayudar a mejorar la fertilidad a los 40. A continuación, vemos los más importantes:
Eliminar el Estrés
El estrés tiene la capacidad de afectar a tu cuerpo, incluyendo la capacidad de concebir. A parte de otras razones, el estrés es de hecho, una de las principales causas de infertilidad en las mujeres que tienen más de 40. Tienes que administrar el estrés si deseas tener un embarazo saludable. Para ello, puedes aprender a mantener un equilibrio en tu vida, y adoptar técnicas como el yoga y la meditación.
Comer Bien
Las alteraciones en la dieta causan irregularidades en los ciclos menstruales y anovulatorios. Consume más aceite de oliva y menos productos como la comida rápida o la bollería. Incrementa la ingesta de proteínas vegetales (cereales) y reduce las animales (carnes rojas). Aliméntate con más cantidad de frutas y vegetales, elimina de la dieta los hidratos de carbono refinados (harina blanca) y el azúcar. Además, modera los lácteos y los refrescos, bebe más zumos naturales y agua. Deja de lado el café en exceso.
Dejar el Alcohol y Tabaco
Esto aplica para ti y tu pareja. Son conocidos por inducir una gran cantidad de problemas de salud, la infertilidad es uno de ellos. Afectan el hígado y los riñones, y por lo tanto, tu salud en general. También aumentan las posibilidades de un embarazo de alto riesgo, incluso si te las arreglas para concebir.
Cuidar el Peso
El sobrepeso y un bajo peso puede ser un motivo de preocupación cuando se trata de concebir, ya que afecta a la producción de hormonas en el cuerpo. También reduce las posibilidades de cesárea, tener bebe bajo peso al nacer, parto prematuro, y la diabetes gestacional. Seguir una dieta equilibrada, y un buen régimen de ejercicio puede ayudar mucho, eliminara esos kilos y te dará un cuerpo sano, listo para la concepción.