En nuestra clínica recomendamos a todas las mujeres que a partir de una determinada edad es muy importante realizarse revisiones periódicas y una ecografía mamaria. La prevención es de los mejores remedios. Hay otro tipo de posibles patologías que, detectarlas a tiempo y poner rápida solución con un tratamiento adaptado, marcan por completo el desarrollo de la enfermedad. Esto sucede, por ejemplo, en lo casos de células cancerígenas como el cáncer de mama.
Es muy importante las autoexploraciones y exploraciones de nuestro ginecólogo en consulta, pero además son fundamentales las pruebas diagnósticas como el método de cribado, para asegurar que todo esta en condiciones perfectas. Entre las pruebas más comunes e importantes se encuentra la ecografía de mama y la mamografía. Desde clínica Pedrosa nos preocupamos por tu salud y queremos cuidarte, por eso la iniciativa de escribir este artículo es informarte, motivarte a realizar las revisiones pertinente y por supuesto, aclarar algunas dudas acerca de las técnicas y diferencias entre ambas.
¿En qué consiste la mamografía?
Cada una de las técnicas nombradas tiene sus peculiaridades. Las mas conocida para diagnosticar el cáncer de mama es la mamografía para toda clase de mujeres.
A través de una mínima radiación, podemos observar el interior de los senos de la mujer. Es tan eficaz que puede mostrar cambios en la mama mucho antes de que el médico o la paciente lo noten.
Desde las campañas de salud publica se aconseja comenzar con las revisiones con mamografía desde los 50 años, pero nosotros y muchos profesionales coincidíamos en recomendar que desde los 40 las mujeres se hagan este examen cada año. Por supuesto, en mujeres con antecedentes de cáncer de mama o de ovarios hay que iniciar estas pruebas mucho antes.
El momento ideal para realizarse una mamografía es una semana después de haber tenido el periodo. Sobre todo, para evita los días en los que los senos se encuentran hinchados y sensibles. No olvides de guardar y llevar las pruebas de los años anteriores para que tu médico o especialista pueda comparar el estado actual con posibles variaciones de la mama si las hubiera.
¿Cómo se realiza una mamografía?
Es un método un poco molesto y que se realiza de manera ambulatorio. Durante la misma, el médico o el técnico en rayos coloca la mama en la unidad de mamografía y la comprime de manera gradual. De esta forma se consigue que todos los tejidos se vean, alargándolos para que no quede ninguna zona oculta. Además, el hecho de que la mama permanezca firme e inmóvil hace que la imagen se vea más nítida.
No tengas miedo a los resultados. Las mamografías evitan el 30% de los casos mortales por cáncer de mama, ya que la tecnología y avances ponen remedio desde el momento que se detecta cualquier pequeño tumor. Si te has olvidado de llevar las mamografías de años anteriores no te preocupes, hoy en día todo se digitaliza y tu especialista podrá acceder a ellos y realizar una comparativa con las actuales. Es importante realizar todo tipo de prevención y revisiones anuales, ya que son muchas las enfermedades que podemos detectar, pero hay que saber que no todos los cánceres de mama se ven en una mamografía.
¿Qué es un ecografía mamaria?
La ecografía mamaria es una técnica de imagen que utiliza frecuencias altas de ultrasonido, que el oído humano no puede percibir. El rebote de estas ondas sonoras en las diferentes estructuras de los tejidos se interpreta en una imagen que analizara el especialista. Generalmente, la ecografía de mama proporciona muy buenas imágenes.
La ecografía mamaría no actúa como técnica sustitutiva de una mamografía, ya que no detecta las micro calcificaciones, que son pequeños depósitos de calcio que en algunos casos puede indicar la presencia de un pequeño tumor. Sólo en el caso de embarazadas y mujeres jóvenes se utiliza como método de diagnóstico inicial en lugar de la mamografía.
En un examen por ultrasonido del seno, el ecografista puede usar técnicas Doppler para evaluar el flujo sanguíneo o la falta de flujo en cualquier masa mamaria. En algunos casos esto puede servir de información adicional.
¿Qué indicaciones tiene la ecografía mamaria?
La ecografía se utiliza para diferenciar entre nódulos o tumores que podemos notar durante la exploración clínica o que se puede observar en la mamografía. La mamografía nos informa si hay alguna lesión benigna o maligna.
Si observáramos un nódulo de características benignas es la ecografía quien nos diría si su contenido es sólido (fibroadenoma) o líquido, siendo entonces un quiste.
La ecografía mamaria es muy útil para ayudar a dirigir en los casos de punción de un nódulo cuando se pretende evacuar un quiste o tomar una muestra para el estudio de las células. En casos en los que se trata de un tumor maligno la información que nos aporta es muy importante.
¿La ecografía sustituye a la mamografía?
No, la ecografía es un complemento estupendo para la mamografía pero no es útil para diagnosticar precozmente el cáncer de mama, en aquellas personas que no tienen un tumor palpable.
Es una técnica muy utilizada e importante en el diagnóstico y manejo de las enfermedades de la mama, tanto benignas como malignas. Normalmente el especialista que ha realizado una mamografía solicita la realización de una ecografía para valorar y confirmar el diagnóstico. Excepto en casos de mujeres gestantes o muy jóvenes se puede utilizar o sustituir a la mamografía.
¿Para que se utiliza la ecografía mamaria?
- Detectar posibles alteraciones en la mama
- Exploración adicional de cáncer de mama
- Biopsia de mama guiada por ecografía
- Distingue un tumor sólido y un quiste de mama (líquido).
Preparación para la ecografía mamaria
- llevar todos los estudios anteriores
- Es un examen rápido, no invasivo y no presenta dolor.
- El gel conductor puede sentirse un poco frío y húmedo.
- Es recomendable asistir al estudio con ropas cómodas.
